¡QUE NO TOQUE COÑO!

Primero pongo la fachada y después el detalle por que tal vez no se dé visualizado con nitidez el contenido ¡ein!Esta foto corresponde a la fachada principal de una casa supuestamente humilde por su aspecto exterior, pues no sabemos que tesoros guarda en su interior, que se encuentra al borde del camino de Santiago en mi querida Galicia.
Como está la casa situada haciendo esquina con la carretera y el camino, punto de quiebro y duda, pues a veces debe ser tremendamente agobiante el paso de caminantes-curiosos-tocahuevos y el paisano/a debe estar ya harto, en galego farto, de preguntas tipo:


pum! pum! pum! (tres toques de puerta con nudillos) ¡buenos días señor/a! ¿es por aquí el camino de Santiago? (mientras le manosea el gato que tranquilo está tumbado en el quicio de la puerta, el pitillo apagado entre los labios, con la boina calada y en la mano... que cantaba Víctor Manuel).
¿cuantas veces al día? aunque no sea ninguna ¿cuántas veces al año?
Tenemos que comprenderlo, pobre hombre/mujer, así que en vez de contestarle:
¡me cago en la puta de bastos! ¡mecago en la cona de los putos peregrinos domingueros de los cojones)
¡y deje ya de manosear de una puta vez al gato! ¡coñoooo!

Y digo que en vez de contestarle lo anterior... pues el paisano/na se sentó frente a su ordenador y en el word escribió algo tan educado como "NO TOCAR LA PUERTA... NI AL GATO", editó, imprimió y colgó...

Para que digan algunos que conocí que los gallegos somos huidizos y le echamos los perros a los caminantes ¡pues no señor! los gallegos también "semos cultos" y sabemos arreglar las cosas con papeles..., o sea..., por escrito... onde hai papeis calan barbas.

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